Desarticulada una banda especializada en hurtos en fiestas patronales de la zona

La Guardia Civil ha logrado la detención de 31 personas de nacionalidad búlgara, integrantes de una banda especializada en hurtos en fiestas patronales. En total, se les imputa 187 delitos de hurto, ocurridos en las fiestas de Las Rozas, Majadahonda, Pozuelo, Villanueva de la Cañada, Tres Cantos, Torrelodones... 

La Guardia Civil ha logrado la detención de 31 personas de nacionalidad búlgara, integrantes de una banda especializada en hurtos en fiestas patronales.
Así lo ha comunicado en una rueda de prensa junto a Concepción Dancausa, delegada del gobierno en Madrid.

En total, se les imputa 187 delitos de hurto, ocurridos en las fiestas de Las Rozas, Majadahonda, Pozuelo, Villanueva de la Cañada, Tres Cantos, Torrelodones... entre otras poblaciones de la Comunidad de Madrid y Castilla La Mancha. 

La red, perfectamente organizada, se componía de 12 hombres y 19 mujeres, de ellas, 11 menores de edad. El equipo se jerarquizaba con 3 cabecillas, 9 jefes de grupo, y los ejecutantes de los hurtos. 

La investigación de la Guardia Civil se inició el pasado mes de Junio, durante las fiestas de Tres Cantos, cuando identificaron a un grupo sospechoso con numerosos antecedentes penales. Esa noche no pudieron actuar, pero lejos de desistir, acudieron nuevamente el siguiente día, robando hasta 23 móviles. La operación encubierta permitió la detención de cinco de los integrantes de la banda.

El modus operandi de la banda consistía en el hurto de teléfonos móviles, carteras, relojes... aprovechando las grandes concentraciones de público, y el estado etílico de las víctimas. Los detenidos simulaban chocar fortuitamente, y aprovechaban el desconcierto para sustraer los objetos de valor que portara la víctima. Este mismo sistema, lo repitieron hasta en 187 ocasiones.

Los objetos sustraidos eran almacenados en "pisos okupados" y posteriormente trasladados, por carretera, hasta Bulgaria, donde pretendían venderlos sin dejar rastro. En el registro de las viviendas los agentes localizaron más de 1.000 teléfonos móviles de última generación, tarjetas de crédito, monederos y carteras, y unos 7.500 euros.

Todos los detenidos son del norte de Bulgaria y etnia gitana, oscilan entre los 14 y los 58 años. Habían viajado a España expresamente para cometer los delitos de los que ahora se les acusa: pertenencia a organización criminal, hurto continuado y blanqueo de capitales. Todos ellos han pasado a disposición judicial, con la prohibición de abandonar el territorio nacional.